Cinco mujeres acusaron a James Franco de varios actos y comportamiento sexual inapropiados, incluyendo acosamiento, y manipulación entre otros.

Fue como una bofetada en la cara”, le dijo Sarah Tither-Kaplan, una exestudiante de la escuela de Cine de Franco, al periódico The La Times, sobre el pin que llevó Franco en su chaqueta con el mensaje “Se acabó el tiempo”, en referencia a la avalancha de acusaciones contra varias figuras de la industria del entretenimiento desde las acusaciones contra el productor Harvey Weinstein.

Entre las alegadas situaciones, Tither-Kaplan describe como Franco removió los protectores de partes íntimas que utilizan las actrices durante rodaje de escenas sexuales, para entonces continuar simulando sexo oral en ellas. Otras dos estudiantes contaron sobre varias ocasiones en que Franco se enfureció con ellas por negarse a actuar desnudas.

Violet Paley, aspirante a guionista, también reveló una ocasión en que Franco la forzó a practicarle sexo oral en público dentro de su automóvil, acto que no habían realizado anteriormente a pesar de estar dentro de una relación sentimental.

Aparte de su abogado negando todas las alegaciones, Franco respondió a las preguntas de Stephen Colbert sobre los tuits que lanzaron algunas de sus acusadoras la noche de los premios Globos de Oro cuando ganó mejor actor por su trabajo en The Disaster Artist:

“Mira, en mi vida me enorgullezco de asumir la responsabilidad de las cosas que he hecho. Tengo que hacer eso para mantener mi bienestar. Las cosas que escuché que estaban en Twitter no son verdaderas. Pero apoyo completamente a las personas saliendo y teniendo una voz porque no tuvieron voz durante tanto tiempo. Así que no quiero bloquearlos de ninguna manera;’”.

“Si he hecho algo mal, lo arreglaré – tengo que hacerlo”.

Esta es solo la más reciente gama de acusaciones contra una prominente figura del entretenimiento en una industria que definitivamente necesita un fuerte ajuste para impedir que gente con poder siga aprovechándose de los deseos y sueños de otros.

Por el momento, hemos visto como muchos de los acusados ya están pagando las consecuencias. Desde Weinstein sacado de la compañía que lleva su nombre, hasta El New York Times cancelando una actividad con Franco por las alegaciones. Si bajan la voz, pueden escuchar las posibilidades de Franco llevarse el Oscar alejándose hacia el horizonte.