En lo que parece ser un “déjà vu” de hace dos semanas, un nuevo intruso fue identificado en el episodio final de la serie Game of Thrones.
Similar al hallazgo del vaso de Starbucks en una de las escenas del cuarto episodio de la serie, fanáticos no tardaron en señalar la aparición sorpresa de una botella plástica de agua en el último episodio de la serie, titulado “The Iron Throne”.
La botella de agua puede ser vista entre los pies de Samwell Tarly, personaje interpretado por el actor John Bradley. En la escena en cuestión, los hombres y mujeres con mayor poder en todo Westeros discuten el destino de Tyrion Lannister, Jon Snow y deciden elegir un nuevo Rey o Reina de los siete reinos. Una segunda botella de plástico también se puede apreciar entre los pies de Ser Davos Seaworth, personaje que interpreta el actor irlandés, Liam Cunningham.
El error solo añadió al disgusto de algunos fanáticos con la dirección de la historia y descuidos como este en la octava y última temporada.
Hasta el momento, 1.2 millones de personas han firmado una petición electrónica que pide se vuelva a hacer esta temporada con nuevos escritores, describiendo a sus creadores, David Benioff y D.B. Weiss como “incompetentes”. Por su parte, Benioff y Weiss se preparan ahora para desarrollar una nueva trilogía de “Star Wars” que comenzarán a llegar en el 2022.