Sobre 30 compañías creadoras de contenido anunciaron una alianza para combatir contra las descargas ilegales o no-autorizadas de sus productos a través del internet. Netflix, Disney, BBC, Fox, y Amazon son algunas de estas empresas componiendo “La Alianza de Creatividad y Entretenimiento” (ACE por sus siglas en Ingles), que “conducirán investigación y trabajarán junto a oficinas de la Ley para detener procesos de piratería ilegal”.

Según el comunicado, la ACE también estará usando herramientas como la litigación civil aprovechando actuales medidas anti-piratería de la Asociación de Filmes de América, trabajando junto a motores de búsqueda y proveedores de internet.

“El robo y la distribución ilegal de contenido protegido por derechos de autor impactan nuestro negocio, la comunidad creativa y la experiencia de los consumidores”, dijo Leah Weil, vicepresidenta ejecutiva senior de Sony Pictures Entertainment. “A medida que la industria evoluciona, la gama y la amenaza de la piratería se expande con ella. Esperamos trabajar con nuestros colegas de la industria de todo el mundo para abordar este urgente asunto.”

Según la ACE, a pesar de existir sobre 500 servicios para disfrutar de contenido legalmente, el 2016 vio sobre 5,000 millones de descargas ilegales que afectan una industria que representa más de 5 millones de trabajos y $1.2 trillones del sector creativo.

Las compañías que componen la alianza son Amazon, AMC Networks, BBC Worldwide, Bell Canada and Bell Media, Canal+ Group, CBS, Constantin Film, Foxtel, Grupo Globo, HBO, Hulu, Lionsgate, MGM, Millennium Media, NBCUniversal, Netflix, Paramount Pictures, SF Studios, Sky, Sony Pictures Entertainment, Star India, Studio Babelsberg, STX Entertainment, Telemundo, Televisa, Twentieth Century Fox, Univision Communications, Village Roadshow, the Walt Disney Company y Warner Bros. Entertainment.

Obviamente, es un tema sensible. Especialmente en tiempos de dificultad económica. Por un lado, se trata de compañías queriendo recuperar la inversión, aparte de creativos queriendo recibir pago justo por su trabajo.

Por otro, la conversación de privacidad se debe mantener arriba de cualquier cosa. Hasta qué punto los proveedores de internet, motores de búsqueda y otros servicios tendrán acceso para investigar este tipo de movida. Hay que tener cuidado de no querer matar moscas con cañonazos.

¿Qué dicen ustedes?