[REC] (2007)
Found footage usado de la forma correcta que activará tu claustrofobia a la máxima potencia. – @ElGeorgeRiveraR
Saw (2004)
Aunque sus secuelas construyeron una sólida franquicia de “torture porn”, la primera película de Saw, dirigida por James Wan, resaltó por ser un estudio psicológico de un psicópata y sus motivaciones. Aunque tampoco es perfecta -muchas de sus fallas residen en un bajísimo presupuesto y actuaciones cuestionables- esta primera de ya ocho películas siempre brillará por contener uno de los giros más inesperados en la historia del género. – @orlandoenelcine
Shawn of the Dead (2004)
Solo Edgar Wright sabe cómo hacerte brincar de miedo y risa a la vez. Jamás escucharás “Don’t stop me now” de Queen de la misma forma luego de ver esta joya. – @ElGeorgeRiveraR
Split (2016)
El tan esperado regreso triunfal del director M. Night Shyamalan finalmente se concretó en el 2017 con Split, tras una década de gestación. La película, anclada por una fenomenal actuación de diversas capas por James McAvoy, la cinta de bajo presupuesto regresó la cineasta a sus raíces, de manera figurativa y literal, pues se trata de un tipo de secuela o “spin-off” de Unbreakable, una de sus películas más celebradas. – @orlandoenelcine
The Babadook (2014)
No me cansaré de recomendar una de las mejores películas de terror de los últimos años, anclada por una sólida e infravalorada actuación por Essie Davis y una impecable dirección de Jennifer Kent. The Babadook es un de las películas de terror más inquietantes que verás en tu vida y una de las exploraciones más reales sobre el sufrimiento de haber perdido a un ser querido. Una exploración de los trastornos psicológicos que resultan de la pérdida, complementada por efectos prácticos, anclan la historia del Babadook a la realidad, ¿y qué más tenebroso que eso? – @orlandoenelcine
The Cabin in the Woods (2012)
En el 2012, Drew Goddard (director) y Joss Whedon (guionista) tomaron el género del terror, con todos sus tendencias y clichés y lo viraron al revés. La película, malentendida por muchos, explora los elementos más comunes del género, exponiendo algunas de sus más grandes fallas mientras celebra todos sus aciertos. Más que una sátira, como comúnmente es descrita, la cinta es una celebración de uno de los géneros más populares del cine. – @orlandoenelcine
The Conjuring (2013)
Para el 2013 mi interés por el cine de terror estaba sumamente bajo. No fue hasta que James Wan sacó, quizás su mejor filme, The Conjuring que mi amor por el género volvió a resurgir. Utilizando técnicas clásicas del género, tiros de cámara, y la mezcla de sonido, Wan lleva a la audiencia hasta el infierno que es la casa de la familia Perron. El filme, además de aterrador, es súper entretenido, algo que a veces muchos directores de horror olvidan hacer. Como muchos filmes de horror actuales, The Conjuring flaquea en ocasiones al caer en los clichés – uno que otro jump scare, las puertas que rechinan, muñecas o juguetes que claramente no deberían ser tocados –. Pero es fácil perdonar estas fallas cuando todo lo demás es tan bueno, especialmente las actuaciones de Vera Farmiga y Patrick Wilson como los famosos Warren. – @ChristianQiibo
The Conjuring 2 (2016)
Si hacer una buena película de horror no es tarea fácil, hacer una buena secuela es más difícil aun. The Conjuring 2 logra ser una secuela al nivel artístico de su predecesora, mientras explora territorio nuevo de forma efectiva. ¿Su mejor recurso? establecer una conexión entre la audiencia y sus personajes principales, antes de enfrentarlos a los horrores sobrenaturales. – Marietere Vélez Negrón
The Descent (2005)
Filmes sobre pérdida y sufrimiento son mi talón de Aquiles, pero The Descent, la segunda película de director Neil Marshall (la nueva Hellboy), es mucho más que eso, lo que la hace mucho más atractiva para los fans del género. Genuinamente aterradora y claustrofóbica, The Descent es elevada por un extraordinario elenco femenino y un guión que, a pesar de sus limitaciones en localidad, se mantiene fresco durante 100 minutos de puro terror. – @orlandoenelcine
The Exorcism of Emily Rose (2005)
Si la imagen de Jennifer Carpenter doblándose en posturas infrahumanas dando horripilantes gritos no es suficientemente aterrorizante para ti, déjame decirte que dichas posturas fueron genuina, sin trucos de cámara o efectos especiales ya que Carpenter es así de flexible. Sin olvidar sus inquietantes expresiones faciales (el grito sin sonido, ufff). – @ElGeorgeRiveraR
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