Mientras el mundo entero intenta descifrar de qué color es un vestido que es CLARAMENTE blanco y dorado, el mundo de los cinéfilos fue sacudido con una de las noticias más anticipadas de las pasadas, digamos, tres décadas.
La secuela de Blade Runner, de la que hemos escuchado maravillas sin haber visto absolutamente nada, finalmente encontró su director en el canadiense Denis Villeneuve, mejor conocido por filmes como Prisoners y su más reciente filme, Enemy, protagonizada por Jake Gyllenhaal y una de mis películas favoritas del 2014.
Así lo anunció la compañía Alcon Entertainment mediante un comunicado de prensa que tomó a todos desapercibidos. Se anunció, además, que el actor Harrison Ford regresará como Rick Deckard, personaje que interpretó por primera vez en el 1982.
“Nos honra mucho que Harrison Ford se nos una en esta jornada con Denis Villeneuve, quien es un talento singular, como bien lo experimentamos con Prisoners. Hampton y Michael, junto a Ridley Scott, han confeccionado una potente, única y fiel secuela a una película que ha sido celebrada universalmente a lo largo de la historia y no podríamos estar más emocionados con este increíble equipo creativo”, expresaron Andrew Kosove y Broderick Johnson, con fundadores de Alcon Entertainment.
Fue el mismo Ford quien el pasado mes de diciembre declaró que había leído el libreto de la secuela y que era “lo mejor que he leído en mi vida”. Al menos eso le aseguró Ridley Scott, director de la primera, a MTV News. Hampton Fancher y Michael Green desarrollaron el guión, basado en una idea original de Fancher y Ridley Scott.
La historia de la secuela se desarrollará varias décadas después de los eventos de la primera película, cuya trama se desarrolla en un Los Angeles distópico en el año 2019.
Se espera que la filmación de la secuela arranque oficialmente en el verano del 2016, por lo que debería estar llegando a los cines en algún momento del 2017.