“Candyman”: Una secuela más relevante que la original

Van casi 30 años desde la cinta original de “Candyman” en 1992, pero eso no significa que los problemas sociales que tocaba esa película hayan desaparecido ahora en el 2021. Debido a esto, el tenebroso “Candyman” está de regreso en la pantalla grande, con una cinta que ofrece más de lo que parece en primera instancia. 

“Candyman” sigue la historia de “Anthony McCoy”, un artista que se reencuentra con la musa luego de escuchar la leyenda urbana de “Candyman”, un hombre que fue asesinado en la comunidad de Cabrini Green y que supuestamente podía ser convocado al decir su nombre 5 veces frente al espejo. Poco después de escuchar el cuento, “McCoy” decide hacer una pieza de arte inspirada en la historia, la cual creía que era falsa hasta que en la primera noche de la exhibición donde estrenó la pieza, un hombre y una mujer son brutalmente asesinados.

Las fortalezas de esta iteración de “Candyman” están mayormente en su guión, y en las actuaciones del filme. El guion, que fue co-escrito por Nia DaCosta (quien también dirige el filme), Win Rosenfeld y Jordan Peele (a quien de seguro conoces por Get Out y Us), toma temas tan relevantes como lo son el racismo, la inequidad entre las clases sociales, y la gentrificación. Si han visto algo de la filmografía de Peele, o de las cosas que ha hecho como escritor, saben que el cineasta es un maestro hablando de temas sociales súper importantes en películas que se venden como cine comercial. Es muy probable que la mayoría de este filme lo hayan escrito Rosenfeld y DaCosta, y quizás por eso la crítica social no es tan profunda como quizás pudo haber sido, pero, de todas formas, está ahí y es inevitable ver el toque de Jordan Peele como guionista y productor del proyecto. Esto es lo que salva a “Candyman” de ser una película de horror banal.

Basado en la propuesta que nos presenta en este filme, no me cabe duda de que Nia DaCosta será una de las directoras que veremos al mando de muchos proyectos de gran escala. “Candyman” es solo el segundo filme de la cineasta americana, que ya tiene a cargo otro proyecto de calibre, como lo es “The Marvels” para el Marvel Cinematic Universe (MCU), y, a pesar de que el otro filme que hizo la directora es otro género completamente diferente, DaCosta dirige “Candyman” con la confianza de alguien que lleva toda una vida dirigiendo horror. El filme es una tensa pieza, que no tiene que apoyarse de los jump scares para hacer que se te erize la piel. 

“Anthony McCoy” es interpretado por Yahya Abdul-Mateen II, a quien quizás recuerden como “Cal Abar” en la serie de HBO Watchmen, o como “Bobby Seale” en The Trial of the Chicago 7. Luego de mencionar estos proyectos demás está decir que Abdul-Mateen II es una potencia en pantalla, y su trabajo en “Candyman” no es de menor calidad, mostrando como un hombre se consume en la demencia por un lapso de hora y media. Tony Todd también regresa como el escalofriante “Candyman”, quien sigue siendo igual de perturbador que en 1992.

“Candyman” tuvo tres retrasos debido a la pandemia del COVID-19, pero el destino le jugó a favor de DaCosta y compañía, porque luego de las protestas de Black Lives Matter, el filme se siente más relevante ahora que en 2020, que era cuando la cinta estaba supuesta a estrenar. Como mencioné, la mayor fortaleza de “Candyman” yace en su guion, creando una película lo suficientemente entretenida para las masas, pero con algo más para aquellos que deseen pensar la película un poco más a fondo. 

“Candyman” se exhibe actualmente en las salas de cine de Puerto Rico.