La película es protagonizada por Kelvin Harrison Jr. y Samara Weaving. Disponible en Fine Arts desde el 20 de abril.
Hay muchas historias biográficas que descubrí por medio del cine y la televisión, y no bajó la educación de las escuelas y universidades. De alguna manera, nuestro sistema educativo suele pecar de repetir lo que citan los libros de historias, los cuales suelen carecer de una revisión. Aunque, no debemos aplaudir al séptimo arte en su intento por contar exactamente los hechos, no dejan de ser un medio que se nutre de entretener al espectador y constantemente suele darse varias libertades a la hora de realizar biografías.
CHEVALIER no es la excepción en ser entretenidamente contada con algunos hechos levemente certeros sobre Joseph Bologne (Kelvin Harrison Jr.), quien fue el Chevalier de Saint-Georges y un gran violinista, compositor, esgrimista, y director de orquesta muy distinguido en la época pre-revolución francesa. “Caballero” es una mejor traducción de Chevalier, y esta esencia de caballerismo es bellamente transmitido en una imponente “partitura musical”, una dirección decente y un elenco comprometido, especialmente Kelvin Harrison Jr. y Samara Weaving, que hacen de CHEVALIER una inscripción digna en el cine. Una historia que este mundo, que continúa con manchas de discriminación, trató de olvidar.
La película no duda en comenzar mostrando el talento de Bologne en un duelo musical contra Mozart, uno de los compositores más influyentes de la música clásica. Luego de este “opening”, uno bien logrado, el largometraje nos otorga una breve retrospección de su niñez: “Un niño que nació del fruto entre una esclava negra y un colonizador francés, siendo su padre quien lo separó de su madre para llevarlo a París y explotar su talento musical”.
CHEVALIER luego continúa toda su trama en la vida de adulto de Bologne, quien quiere ser parte de una de las orquestas más importantes de París y se enamora de Marie-Josephine de Montalembert (Samara Weaving), una joven cantante de Ópera casada con uno de los comandantes del reinado de Marie Antoinette. Es aquí donde el racismo y el discrimen limitan al violinista a poder lograr dos cosas en su vida: ser el compositor de la gran orquesta y expresar su amor incondicional por Josephine. Esto lleva al Chevalier a incitar un cambio en la sociedad a través de su talento.
CHEVALIER es de esas películas que deberían ser parte del catálogo del sistema educativo, en particular las clases de historia. Jamás escuche sobre este relato, y posiblemente es porque la misma sociedad así quiso enterrarla desde sus comienzos, un mundo que aún tapa estas historias por su carga discriminatoria. Y posiblemente puedas educarte sobre él buscando en Internet, pero ese acto lo harás porque lo estoy mencionado. Indiscutiblemente, desconocía de la existencia de Bologne, y conocía más sobre Mozart, y es por esto que su “opening” es maravilloso, porque te saca del podium al reconocido Mozart y te muestra la historia ocultada de este gran Chevalier.
Y la dualidad continua cuando delicadamente dos actores como Kelvin Harrison Jr. y Samara Weaving tienen una conversación que me vendió esta película. Un diálogo que muestra el sentir humano en medio de dos discrimenes que en la actualidad persisten: el racismo ante la comunidad negra y el sexismo ante la mujer. Exploraciones que la película logra exponer muy bien, aunque al final se incline por completo al tópico del racismo, haciendo de la trama predecible.
Estos temas son logrados de manera hermosa, gracias a la dirección de Stephen Williams, una delicada y sutilmente cuidada en cada encuadre que refleja el “caballerismo” explorado por la interpretación de Harrison Jr.. Una personificación cuyo desarrollo se nutre de gran manera por una empoderada banda sonora de Kris Browers, haciendo de este drama uno fácil de disfrutar.
Luego de ver este largometraje, es menester evaluar nuestro sistema educativo e incluir estas historias que no tuvieron oportunidad de ser exploradas en el pasado. Es preocupante que esperara tanto para conocer, en el cine, esta figura que fue parte de la revolución francesa, algo que entiendo que enseñan mucho en las escuelas. ¿Verdad? Chevalier, disponible en Fine Arts desde el 20 de abril. Chevalier: Una historia que solo el cine pudo contar