Por Orlando Maldonado
El actor y cantante puertorriqueño Carlos Ponce continúa su transición de la televisión al cine con la comedia “Spy” del director estadounidense Paul Feig.
En Spy, el actor de 42 años personifica a Ryan, un espía de la CIA que se ve forzado a mantenerse fuera de la acción tras haber sido identificado, junto al resto de los agentes activos, por la villana Rayna Boyanov (Rose Byrne).
Ponce, quien ha trabajado anteriormente con comediantes como Vince Vaughn y Jason Bateman, se une en esta ocasión a la comiquisima Melissa McCarthy, una de las comediantes mejor cotizadas de Hollywood.
En una llamada telefónica con Orlando Maldonado de Movie Network, el actor habló de su personaje, la situación de los actores latinos en Hollywood, lo mejor que se lleva de haber trabajado con Paul Feig, el futuro y su próxima visita a Puerto Rico.
¿Cómo crees que ha cambiado la situación de los actores latinos en Hollywood desde que comenzaste a actuar?
Carlos: Creo que ha cambiado. Ha mejorado, sin duda alguna. Desafortunadamente, no creo que lo suficiente para donde estamos. Creo que la representación que tienen los latinos en el cine, evitando los porcentajes, son absolutamente ridículos, cuando algo como el 25% de la gente que visita el cine son latinos.
¿Dirías que ahora tienes más opciones que antes?
Carlos: Hay un poco más de opciones. Una puerta que no se ha abierto todavía es que nos vean como actores, no necesariamente o solamente como actores latinos. A lo mejor no todos damos la talla físicamente, pero cada quien debería tener la posibilidad de ir a audicionar como actor y no necesariamente como latino.
¿Cómo comparas el trabajo que haces en la televisión al que haces en el cine?
Carlos: Yo creo que no es tanto la televisión versus el cine sino cada una de las producciones. Cada producción tiene su esencia, equipo, su director, productor y cada proyecto es diferente. No creo que haya una similitud entre las novelas y la comedia.
¿Dirías que disfrutas más de uno que del otro?
Carlos: No, disfruto de un buen personaje. Disfruto de un personaje con el que el público se pueda conectar. También es cuestión de entretener el gusto general del público. Sí tengo ambiciones y cosas que quiero lograr en mi carrera, no necesariamente porque me guste una cosa más que la otra.
Hablando de personajes,no es mucho lo que se revela de tu personaje en esta película. ¿Te reveló el director Paul Feig algún detalle del personaje que te sirviera de guía?
Carlos: Mira, en este tipo de comedia se utiliza mucho la improvisación y se cuelan cosas que ni tan siquiera estaban en el libreto. El director también conversa uno sobre aspectos personales para ver cuánto puede aportar uno a la actuación.
¿Qué tipo de espía es Ryan, uno temerario como el personaje de Jason Statham o uno más cuidadoso?
Carlos: Este es un personaje un poquito “airhead”. Es uno de esos personajes que cree que se las sabe todas pero se puede equivocar en cualquier momento. Le salen las cosas bien pero le salen así por casualidad o porque otra persona ayuda a que él se quede con el crédito.
¿Cuán familiarizado estabas con el trabajo de Paul Feig cuando te uniste al proyecto?
Carlos: Bastante. Ya nos conocíamos por un amigo que tenemos en común.
¿Qué es lo mejor que te llevas de haber trabajado en esta película?
Carlos: La colaboración con grandes comediantes. Uno nunca deja de aprender. Paul es un gran caballero y tiene un don de manejar sus relaciones pública maravillosamente. Además, el viaje maravilloso a Budapest, donde tuve tiempo libre para disfrutar y conocer un país que no conocía.
Tu primera escena en la película es para mi una de las más graciosas. ¿Cuán difícil fue contener la risa en un cuarto con todos estos comediantes?
Carlos: Pues mira, para estas películas hay lecturas de guión, y si algo se queda en el libreto es porque funciona y el director ya lo ha repetido varias veces y se convierte en algo más serio. Al principio sí te mueres de la risa y ahí es que sabes que tienes algo muy bueno, de mucho valor.
¿Fue en algún momento intimidante?
Carlos: Pudo haber sido intimidante. Me sentí más intimidado cuando hice “Couple’s Retreat” porque no tuve ningún tipo de contacto con ellos o algún tipo de amistad previo a la filmación. Tampoco hubo “table readings” donde uno se sienta y va conociendo. Con esta fue un poco diferente porque me levantaba, iba al gimnasio, desayunaba y ahí podía estar Melissa con su esposo, quien es también comediante, y sus hijos. Fue muy familiar.
¿Qué es lo próximo para ti?
Carlos: No había hecho planes porque estábamos esperando confirmación de una segunda temporada de “Cristela” que no se nos dio, o al menis no se nos ha dado en el mismo canal.
Están muy de moda las películas de superhéroes. ¿Existe algún personaje que te gustaría interpretar en la pantalla grande?
Carlos: Yo creo que podemos hacer El Chapulín Colorado.
Al cine le hace falta una versión “dark and gritty” del Chapulín Colorado.
Carlos: También se puede hacer algo de un luchador como Carlitos Colón.
¿Tienes planes de regresar de lleno a la música?
Carlos: Tendría que empaparme nuevamente de conocimiento de este negocio que ha cambiado completamente desde la última vez que estuve activo.
Te tengo que preguntar… ¿Cuándo vienes a Puerto Rico?
Carlos: ¡Me urge! Me hace muchísima falta, de verdad. Mi tío se acaba de casar y desafortunadamente no pude llegar a la boda.
Pues te esperamos y te deseamos mucho éxito en todos tus proyectos. Gracias por tu tiempo.
Carlos: Gracias, un abrazote.