Ruby Rose primero cautivó audiencias como la reclusa Stella Carlin en la serie Orange is the New Black. Luego, demostró que estaba hecha para el cine de acción en películas como Resident Evil: The Final Chapter, xXx: The Return of Xander Cage y más reciente, en la excelente John Wick: Chapter 2. Para la tercera entrega, la actriz nos confirmó en exclusiva que no estaría de regreso. Pero no importa, pues este jueves, la DJ convertida en actriz se prueba en el cine de tiburones -un subgénero del cine por sí solo- con el estreno de la cinta The Meg.
Aquí, la actriz y modelo australiana se sumerge (de manera literal y figurativa) en una propuesta que coquetea con la comedia, pero cuyo atractivo principal es el enorme tiburón prehistórico que acapara el afiche oficial, cuyo “tagline” genialmente lee “Chomp on this”, que traducido al español diría algo como “mastica esto”.
Desde que Jaws se integró de manera integral en la cultura popular en el 1977, las películas de tiburones han sido uno de los mayores atractivos para audiencias alrededor del mundo. La premisa es simple: humanos se meten con el tiburón, el tiburón se come al humano. La idea de ser devorados por el rey de los océanos siempre ha fascinado a los amantes del cine, por razones que ni los propios cineastas y actores logran entender.
“Todo lo que hace falta es saber que es una película con un tiburón gigante”, bromeó la actriz vía llamada telefónica con Movie Network, por motivo del estreno de la película.
Rose interpreta a Jaxx Herd, la ingeniera detrás de todos los dispositivos que facilitan la cacería de un Megalodón que se creía extinto, pero que por nuestras acciones es atraído a la superficie y, por supuesto, a las playas llenas de personas cuyo mayor miedo está a punto de ser una realidad. ¿Mencionamos que está protagonizada por Jason Statham? Es la receta perfecta para un filme veraniego
MN: La gente adora las películas de tiburones. ¿Alguna teoría de por qué no las hacen más seguido?
RR: Creo que la barra de películas de tiburones está muy elevada, y creo es evidente cuando las comparas con algo como Jaws o alguna de esas películas icónicas. No es diferente a algo como Jurassic Park, y cómo los dinosaurios nos han enseñado que si vas a hacer una película de tiburones, será mejor que tenga una historia fantástica y que de alguna manera la hagas diferente a las películas del pasado. Tampoco es fácil hacer una película de tiburones, pues es algo que requiere muchos efectos visuales.
MN: Creo que la meta con cada película de tiburones no es necesariamente hacer algo mejor que Jaws, pero sí algo suficientemente diferente o innovador, y creo que lo han logrado aquí con un elenco diverso y un tono que se aleja de otras películas de tiburones. ¿Estás de acuerdo?
RR: Sí, estoy de acuerdo. [La película] está basada en la novela del magnífico escritor, Steve Alten. Por muchos años han tratado de adaptarla al cine, por lo que fue emocionante enterarme que finalmente la harían una película. Ser una película sobre el Megalodón y no un Tiburón Blanco la hace más misteriosa y diferente a lo que la gente ya ha visto. Encima de eso, el director Jon Turtletaub le dio un giro diferente, además de contar con un elenco increíblemente diverso. Hay partes de la película que son aterradoras, pero también hay partes que son graciosas. Otras simplemente son divertidas y ruidosas. La meta de Jon siempre fue hacer algo único, y siempre tuve mucha fé en él y en el resultado.
MN: ¿Crees que tener un equipo diverso detrás y delante de las cámaras es clave para el éxito de una película?
RR: Absolutamente, y creo que lo estamos viendo ya -gracias a Dios- en todos los medios y entretenimiento. Ha tomado mucho tiempo y creo que todavía nos queda mucho por conseguir, pero creo que estamos viendo que la gente se siente atraída a elencos diversos. Gente con diferentes trasfondos pueden contar historias de un punto de vista diferente y arrojar otro tipo de luz. Tener un elenco diverso permite que más personas pueden relacionarse con alguien, y creo que es algo sumamente importante. Verte representado en la pantalla grande es magnífico. Además, ver otros géneros y etnicidades representadas en el cine es genial porque nos permite aprender sobre otras personas.
MN: Probablemente ya sé la contestación a esto, pero, ¿Cuál es tu película de tiburones favorita?
RR: Diría que Jaws, que fue una película icónica en el momento en que estrenó, pero no sé si debería tratarla como una [película de tiburones].
MN: Mencionaste lo difícil que es lograr que el CGI le haga justicia. Como actriz, ¿cómo trabajas la parte de reaccionar a algo que no está ahí? ¿Cómo te ayuda el director?
RR: Cuando teníamos que trabajar con pantalla verde, Jon nos guiaba y nos iba diciendo lo que estaba en pantalla, fuese un pulpo gigante o el megalodón, y reaccionábamos acorde. Algunas veces simplemente nos dejaba utilizar nuestra imaginación.
MN: ¿Cuál dirías fue el reto más grande de la filmación de esta película?
RR: Creo que no hubo retos enormes, ¿sabes? Están los retos básicos como aprender términos científicos y la jerga de un ingeniero. El reto era aprenderlos y poder decirlos de manera casual, como Jaxx lo haría. Pero creo que el reto más grande fue el clima, porque filmamos parte de la película en el océano y allí era muy impredecible. A veces nos preparábamos mental y físicamente -con maquillaje y cabello- para una escena, pero empezaba a llover y teníamos que cambiar a otra escena dentro del estudio. Tuvimos que ajustarnos mucho y rápidamente a las condiciones del tiempo.
The Meg se exhibe actualmente en las salas de cine de Puerto Rico.