The Princess fluye en la acción sin importar su trama

¿Alguna vez has tenido la sensación de disfrutar una película que le puede parecer mala, o vergonzosa para los demás?  Esta emoción la podemos llamar guilty pleasure, algo que todos y todas tenemos que experimentar en algún momento, y más si eres un cinéfilo.  La actriz Joey King figura en tres películas que considero en mi lista de guilty pleasures: Su trilogía completa de Kissing Booth.  Estas películas para nada son buenas, pero es como un disfrute verlas por ser malas.  Joey King, a quién admiro por su papel en la miniserie The Act, regresa con la película The Princess para Hulu, cinta que la constante acción hace de una experiencia bien divertida y la salva de ser catalogada como una ¨mala película¨ a pesar de no tener ninguna trama o personajes memorables.

The Princess narra la historia de una hermosa princesa, llamada, pues, Princess (Joey King), que se niega a casarse con su prometido (Dominic Cooper), un sociópata que la secuestra y la encierra en una torre.  Princess se encomienda a poder escapar y realizar su venganza tomando el trono de su padre de las manos de su prometido, para proteger a su familia y su reino. 

The Princess, bajo la dirección de Le-Van Kiet, es lo más cercano a la pantalla grande de Xena: Warriors con una combinación de Conan The Barbarian. La película es un intento de replicar escenas de acción bastante constante, similares a películas como Atomic Blonde, John Wick, Kingsman e incluso, me da una leve sensación, de Mad Max: Fury Road, solo en términos de escenas de acción. En The Princess hay acción de principio a fin, siendo el primer tramo bastante consolidado en el encierro de la princesa en una habitación rodeada de soldados, donde prácticamente suceden varias escenas intensas en su intento de escapar. 

No obstante, a pesar de entretener y mantenernos atentos a la manera en que ejecutaron cada escena de acción, unas muy buenas y otras nefastas, la trama y los personajes no son memorables. Llega un momento que te da igual si los personajes mueren, son heridos o desaparecen. Incluso me dio igual si la princesa seguía secuestrada o no. Aunque claro, King disfruta su personaje y más cuando la trama permite que salga de la torre y continúe su venganza alrededor de todo el castillo. Esta venganza hubiera sido más memorable si cada montaje de acción tuviera un soundtrack acompañándolo. 

En fin, The Princess es un guilty pleasure más en mi lista que, honestamente, la única razón de verla es tener esta ilusión de disfrutar toda la acción ocasionada por la Princesa, y bien que ella se disfrutó su intento de ser vengativa. Sin embargo, no hay espacio para poder desarrollar la historia, si es que hubo alguna intención de decir algo.  The Princess ya está disponible en Hulu.