Los protagonistas de tus pesadillas de infancia cobran vida en esta aventura de terror, fantasía y humor, basada en las famosas novelas para niños del autor R.L. Stine, personificado por Jack Black con un toque extra de maldad y poco de ese humor intencional que caracteriza al actor. No es que el humor no esté presente en “Goosebumps”, lo refrescante es que llega a manos del elenco secundario y no de Black, un reconocido comediante. Esto le da más espacio al actor para explorar otras características de un personaje extremadamente gruñón y sobreprotector de su hija. El resultado es una entretenida aventura para toda la familia que provocará suspiros y encogida de hombros en cinéfilos donde mismo provocará risas en los niños que vayan en busca de terror y humor sano.
Cuando las criaturas más aterradoras que ha creado el autor escapan las páginas de los libros e invaden los suburbios de Greendale en Maryland, el nuevo chico del vecindario, su mejor amigo Champ (Ryan Lee), Stine y su hija adolescente Hannah (Odeya Rush) deben buscar la manera de atraparlos antes de que sea muy tarde. Mientras tanto, Slappy -el títere de ventrílocuo y principal antagonista de la serie literaria infantil- se encarga de liberar al resto de las criaturas y destruir los libros en un acto de venganza hacia su creador por haberlo encerrado durante años en un librero. En el proceso, tanto Stine como Zach (Dylan Minnette), quien recientemente perdió a su padre, aprenderán una que otra cosa sobre la familia y superar pérdidas que alteran tu vida para siempre.
“Goosebumps” es la película a la que llevas a tus hijos a pasar un buen rato y no necesariamente juzgas con la misma métrica que utilizarías para “Crimson Peak”, otro filme de terror que llega a los cines esta semana. Mientras que uno es el más reciente filme del aclamado director, Guillermo del Toro (El Laberinto del Fauno), el otro es una adaptación de literatura infantil en la que sobresalen título como “The Horror at Camp Jellyjam” y “Go Eat Worms!”. “Goosebumps” es lo que es, y no hay mucho más que buscar. La historia toma las direcciones que ya esperabas y los personajes bailan al ritmo de una historia que se arriesga muy poco.
Slappy, el protagonista de “Night of the Living Dummy”, hace su debut en el cine como el principal causante de risas y escalofríos, los dos ingredientes principales de esta fiel adaptación. Black prestó la voz para dar vida a Slappy, siendo este un tipo de presagio sobre quién será Stine en el futuro de continuar apartado del resto de la sociedad.
Si eres fan de las historias, encontrarás diversión en las innumerables referencias a ellas. Si no lo eres, podrás disfrutar de su recreación para la pantalla grande utilizando tanto efectos prácticos como computarizados que podrían avergonzar los de películas que han estrenado este mismo año, por no decir este mes. Donde falla la película, aún siendo una aventura para la familia, es en la exclusión de héroes femeninos por resaltar las hazañas de Black y Minnette, quienes finalmente se acreditan el haber salvado al pequeño pueblo de monstruos gigantes y escalofríos.