5. The Lobster

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En un “setting” distópico pero más cerca de la realidad de lo que su premisa revela, el filme THE LOBSTER de Yorgos Lanthimos expone las absurdas exigencias de una sociedad obsesionada con encontrar al amor de su vida. Absurda y difícil de digerir, la película es una clase maestra en mantener el tono satírico que establece desde el principio mientras te invita a reflexionar sobre el amor,  la soledad y el disfrute de ambas.

4. Green Room 

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El segundo filme de Jeremy Saulnier (BLUE RUIN) es un ejercicio en tensión que constantemente se reinventa con giros inesperados y se beneficia de un grupo de personajes que toman decisiones inteligentes y reales, a diferencia del grupo de idiotas que suelen protagonizar filmes de género. Saulnier demuestra dominio total del artificio y nunca se muestra titubeante en llevar la historia en direcciones inesperadas, pero más que nada, perturbadoras.

3.Everybody Wants Some!! 

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En el 1993, el director Richard Linklater nos trasladó a los últimos días de Escuela Superior de un grupo de personajes coloridos y situaciones cotidianas con DAZED AND CONFUSED. 23 años más tarde, la secuela espiritual de esa película se desarrolla durante los primeros días de universidad de otro set de personajes que también se quedarán con nosotros por las próximas dos décadas. Linklater, como ha demostrado con una brillante filmografía que incluye películas como la trilogía de BEFORE y BOYHOOD, es un maestro de momentos específicos en la vida de una persona con los que todos nos podemos identificar.

2 . The Witch 

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La película más inquietante del año viene de parte de un director y guionista primerizo cuyo futuro en el cine luce prometedor. Robert Eggers presenta a una familia con temor de Dios, cuyos miembros se van en contra unos de otros y su fe se pone a prueba cuando empiezan a suceder cosas inexplicables, incluyendo la desaparición del bebé de la familia.

1. Sing Street 

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La clave de un bien musical es contar con personajes coloridos y música original y memorable. Esto está claro para el director John Carney, quien nos obsequia su mejor película desde ONCE. Carney ha confeccionado una historia sobre madurez y el proceso de creación de música irresistible para los románticos sin remedio y amantes de la música. Sin ser muy obvio, Carney reflexiona sobre encontrar inspiración en la cotidianidad y los eventos que definen nuestra adolescencia para crear música, escondiendo detalles que podrían escapar el ojo común y que más adelante toman forma en líricas y los diferentes estilos que adopta la banda titular.

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