A menos que tu nombre sea Ronald Reagan o seas un presidente de los Estados Unidos lo suficientemente “cool” como para salir en una película, si alguna vez te toca hacer  de Jefe de Estado en una producción cinematográfica, probablemente sea uno ficticio. Luego de que Daniel Day Lewis recibiera su tercer Oscar por interpretar a Abe Lincoln, los actores simplemente no han tenido el atrevimiento. Pero no te preocupes, porque el que no sea basado en un presidente real no lo hace menos importante o memorable. Así lo han demostrado una serie de actores que han personificado presidentes ficticios en el cine que hoy en día recordamos y le otorgamos un espacio en esta lista, inspirada en el estreno de la secuela “London Has Fallen” de Focus Features, la cual se empezará a exhibir en las salas de cine de Puerto Rico desde este jueves, 3 de marzo del 2016.

El elenco original regresa en “London Has Fallen”, secuela de “Olympus Has Fallen” que transporta la acción a Londres, donde Mike Banning ( Gerard Butler), descubre un plan para asesinar a todos los líderes presentes en el funeral del Primer Ministro. El resto del elenco lo componen Aaron Eckhart, Charlotte Riley, Morgan Freeman, Angela Bassett, Melissa Leo, Radha Mitchell y Robert Forster.

A continuación, algunos de los presidentes ficticios más memorables del cine.

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No ha existido presidente más paciente que Benjamin Asher, pero tampoco más humano. En un año en el que Hollywood puso en peligro al presidente no una, pero dos veces, Eckhart indudablemente dio vida al más humano de los dos. Esto, gracias en parte a un guión que se tomó el tiempo de crear una historia de trasfondo para ambos protagonistas. Después de todo, no hay nada peor que dos personajes en peligro con los que no te puedes identificar ni un poquito.

Frase memorable: “You from the North? You sure as hell are not from the South.”

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Innegablemente inspirado en el actual Presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, el Presidente James Sawyer posee todas las características que hacen de Obama un presidente “cool” y “moderno” ante el ojo público. Aunque, parte del crédito debe ir al director alemán Roland Emmerich, su obsesión con destruir a los Estados Unidos y sus secuencias de acción en las que no faltan los tiroteos y explosiones. Es que mucho más divertido que ver a Channing Tatum jugar a John McClane es ver a un presidente tratar de salvarse a sí mismo en medio de un ataque terrorista. ¿Mencioné que en un momento de la película el presidente utiliza un lanzacohetes?

Frase memorable: “Get your hand off my Jordans.”

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Harrison Ford ha sido de todo en su extensa y exitosa carrera; Han Solo, Indiana Jones y el Presidente de los Estados Unidos, James Marshall, en uno de los mejores filme de su tipo, y uno que integra dos de las premisas más exitosas de los noventa: poner al presidente en peligro y secuestrar un avión. Podrá sonar trillado, pero cuando tu filme es piloteado por Ford como el héroe y Gary Oldman como el villano, al menos puedes contar con dos actuaciones de primera clase. En manos de otros, dicha premisa podría resultar en un viaje turbulento (estos puns no se escriben solos). Para referencia, véase “Turbulence” (1997).

Frase memorable: “Get off my plane!”

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Ni una sola persona se resistió a juntar sus manos en aplauso tras el discurso del presidente Thomas J. Whitmore, justo antes de montarse en un avión de guerra para enfrentar extraterrestres el 4 de julio. Que no se nos olvide que hizo todo esto justo después de ver morir a la Primera Dama.

Frase memorable: “The 4th of July will no longer be known as an american holiday, but as the day the day when the world declared in one voice: We will not go quietly into the night! We will not vanish without a fight! We’re going to live on! We’re going to survive! Today, we celebrate our independence day!”

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Antes de Barack Obama, tuvimos al Presidente Beck, un presidente negro que llegó exactamente una década antes de que los Estados Unidos de América eligieran al primer POTUS negro en la historia. En medio del caos y la desesperanza, el Presidente Beck mantuvo la calma y siempre se dirigió a su país y el resto del mundo con urgencia y honestidad. Además de Dios y más reciente la voz de Waze, Morgan Freeman fue el presidente buena onda antes de que se ser presidente lo fuese.

Frase memorable: “But the waters receded.”